Te quiero, sin reflexionar, inconscientemente, irresponsablemente,
espontáneamente, involuntariamente, por instinto, por impulso.
En realidad no tengo argumentos lógicos, ni siquiera improvisados.
Sólo sé que te quiero. Nunca pensé que fueras a ser tú, pero lo eres.
Eres tú y tu manera de hacer las cosas. Tu forma de mirarme, tu risa, tus gestos, tu pelo.
Porque se me acabaron las excusas, y ya no puedo decir: "Si tu supieras",
porque lo sabes, porque me conoces.
No hay comentarios:
Publicar un comentario